miércoles, 31 de diciembre de 2014

Un año más de Holanda y de blog


En Holanda, donde no tuvimos ébola pero sí un brote de gripe aviar, no ha sucedido demasiado en 2014. Quitando el incidente del avión derribado en Ucrania, claro. Que fue tan grave que hasta se notó en la calle. El restaurante mexicano al que desde el trabajo pedimos buratos a domicilio pasó unos días cerrado, pues uno de sus empleados iba en el MH17.

También, como se iba viendo venir, en Diciembre se armó la marimorena con los Zwarte Pieten. Tras una avalancha de denuncias, las principales cadenas holandesas eliminaron el merchandising dedicado al polémico paje de sus estanterías, haciéndolo cada vez más difícil de encontrar. Los villancicos cambiaron su letra como tocados por la varita del ministerio de la verdad de 1984 y los diputados de partidos más derechistas se presentaron al trabajo enfundados en sendos disfraces de Pedritos negros para protestar por su inminente erradicación. A los ayuntamientos les tocó decidir qué se haría en los desfiles públicos con estos personajes. Mientras algunos optaron por pintarlos más negros todavía, otros trataron de enmendar el entuerto con Pieten payasiles de viva gama cromática; iniciativa que no logró evitar graves disturbios durante las fiestas.


domingo, 30 de noviembre de 2014

El misterioso escultor de Amsterdam y sus obras esparcidas por toda la ciudad


Estaba yo este viernes, como cualquier otro viernes, trabajando en la oficina (o más bien intentando trabajar). Y mientras un chino y un griego me cantaban en estéreo, mi jefe decidía que no quería ser menos que su empleado nuevo (que por cierto viene de una empresa de ésas que se dedican a mandarte mensajitos fraudulentos al móvil; perfectamente legal y ubicada en pleno centro de Amsterdam para más datos). Para competir con el rifle de balas de gomaespuma que el susodicho trae consigo desde el primer día de trabajo, el jefe de marras corría en su moto a una juguetería para hacerse con dos pistolitas de plástico, mientras a través de nuestras paredes de vidrio se podía ver una niña rubia de unos tres años corretear pasillo arriba pasillo abajo vestida de princesita, corona incluida. En ese momento pensé que en este país, o al menos en esta ciudad, puede pasar cualquier cosa sin que nadie se inmute demasiado. Al fin y al cabo es la ciudad en la que te levantas una mañana y ves que han aparecido de la nada estatuas que antes no estaban. ¿No sabes de qué te hablo? Entre 1982 y 1995 aparecieron en Amsterdam seis estatuas, perfectamente asentadas en la vía pública, sin que nadie reclamara su autoría o admitiese saber nada del asunto. A día de hoy, a pesar de lo mucho que ha llovido, sigue sin estar clara la resolución de éste, uno de los mayores enigmas de la ciudad. Analicemos pues cada una de las estatuas y la historia que hay detrás de ellas.

domingo, 16 de noviembre de 2014

Renovar el DNI o pasaporte español en Holanda


La cosa empieza rodada: El DNI no puede renovarse fuera de territorio español, así que no te queda más remedio que esperar a tu vuelta a casa por navidad, o por lo que sea, para liquidar estos trámites. Entretanto, para no quedarte indocumentado por tierras extranjeras, has de ir tirando de pasaporte. En este artículo, cuya mitad acaban de ahorrarme las leyes de emigración, explicaremos como se saca o se renueva este documento dentro de los Países Bajos.

domingo, 28 de septiembre de 2014

Un visitante inesperado o no sólo de arañas vive Holanda


Normalmente no es necesario que me lleve trabajo a casa. Sin embargo existen ocasiones aisladas en que algún programa de los que soy responsable falla (yo me dedico a programar) y me toca desempacar el portátil de madrugada y buscar el problema desde el sofá. Esto mismo sucedió una noche del pasado agosto en la que, como de costumbre con mucho nerviosismo, me puse a analizar dónde estaba el problema.

En esto que en cierto momento me levanto para ir a la nevera y descubro un enorme círculo de nata (nata de soja, pues no tomo lácteos) en medio del suelo, junto a las alacenas. ¿Qué cojones? ¿De dónde puede haber salido esto? - pensé - Abrí la alacena buscando la fuente de dicha mancha y ahí llegó el horror. El contenido del armarito parecía estar revuelto, es decir, más revuelto de lo que está de costumbre, y un cartón de nata yacía tumbado y agujereado por varios sitios, claramente roído con avidez, y esparciendo su contenido profusamente por dentro y fuera de la alacena. ¡Vaya shock! Todos los indicios apuntaban al hecho de que así, de un momento para otro, tenía una rata en casa. Y además la jodida rata era vegana. La incredulidad del momento me hizo sin embargo proseguir con con la inspección del lugar para confirmar la - ahora veo que evidente - hipótesis. Si de verdad había una rata tendría que haber cagadas. Y de hecho, tras una segunda visual, detecté lo que podrían ser las caquitas de marras; pequeños cilindros de color negro. Con la mala suerte de que esa semana, justo esa puñetera semana, había traído a casa un paquete de los famosos hageslaag o canutillos de chocolate, con lo que hube de agarrar una de estas presuntas deposiciones y observarla de cerca, muy de cerca, para emitir el veredicto final.

miércoles, 3 de septiembre de 2014

Hoteles raros raros que te encuentras a lo largo y ancho de los Países Bajos (I)


Durante todos estos años casualmente he leído u oído hablar de hoteles poco convencionales a lo largo y ancho del territorio holandés. Cada vez que me topo con uno lo apunto, y como ya tengo una buena lista ha llegado el momento de sacar un artículo al respecto. Si quieres venir a Holanda pero pasas de vacaciones convencionales o si ya estás aburrido de vivir aquí y te apetece un descansito en un lugar un poco diferente, aquí va la primera parte de mi selección. Hoteles caros y baratos, elegantes y chabacanos, cómodos e incómodos… para gustos se pintan colores. He aquí los primeros siete.

martes, 26 de agosto de 2014

Tres historietas de Amsterdam (y una de Londres)


En el artículo de hoy, que va a ser ligerito, veremos tres carteles colgados en la vía pública por personajes espontáneos (presumiblemente extranjeros, ya que los reclamos están en inglés) que me he encontrado este verano por Amsterdam y alrededores. Todos ellos están buscando algo que no encuentran (y ojo, no es un gato perdido pues anuncios de este tipo los ves en este país cada cuatro farolas). Sin más dilación, vayamos con las tres historietas de gente que no encuentra lo que busca que hoy nos ocupan.

jueves, 14 de agosto de 2014

Productos y platos típicos de Holanda: Guía completa


Hace un tiempo visité Bélgica y tenía clarísimo que lo que había que probar allí eran los mejillones con patatas fritas, los gofres y el chocolate. Por contra hace poco estuve en Alemania y a excepción de las famosísimas salchichas, que no son lo mío precisamente, no se me ocurrió qué otra cosa especial podía comer. Para que, si planeáis venir a Holanda, no os quedéis en blanco como me sucedió a mí, en este artículo recopilaré los productos más característicos, sean o no interesantes, se pueden encontrar en este país.

domingo, 27 de julio de 2014

Mis ¿adorables? vecinos


Allá por dos mil diez encontré un trabajo en Holanda buscando a través de internet. La entrevista tuvo lugar muy poco tiempo después de aquella infame final futbolística entre España y Holanda, por lo que pensé que no me contratarían. Pero lo hicieron. Disponía de un mes para encontrar alojamiento e instalarme en el país de los tulipanes. No tuve más remedio que localizar mi primera casa también a través de internet, lo cual no resultó nada fácil (esta historia daría para hablar largo y tendido). El caso es que algo encontré, y obviamente tecleé la dirección en google view para verificar que dicha vivienda existía. Las imágenes mostraban lo que parecía ser una casa de bien, grande de más para los cuatro inquilinos que se supone seríamos y que se alzaba solitaria en medio de la nada. Cuando por fin me personé físicamente en medio de esta estampa, una tarde de octubre en que la lluvia me calaba los huesos y me las veía negras para sujetar a duras penas ora dos maletas de quince quilos ora mis pantalones, que resbalaban hacia abajo por haberse quedado el maldito cinturón olvidado en el control de seguridad del aeropuerto, observé algo extraño: Mientras una mitad de la casa era sobria, rodeada por un jardín en el que un único árbol de hoja caduca destacaba entre el césped mal cuidado, en la otra florecía una colorida orgía de petunias y rododendros. Además había dos puertas.

martes, 24 de junio de 2014

¿Qué significan las mochilas colgadas en la fachada de algunas viviendas?


Como mencioné en otras ocasiones, cuando hará ya cuatro años me vine a vivir a Holanda, fui a caer en una casita compartida que alguien tuvo a bien edificar justo en la linea divisoria que separa los municipios de Aalsmeer y Amstelveen. Uno de los inconvenientes de dicha vivienda era que para ir a la parada de metro era necesaria una caminata de unos veinte minutos, lloviese, nevase o brillase el sol (y vaya si nevó aquel invierno). Durante el archiconocido trayecto, sin embargo, dada la tendencia al exhibicionismo del ciudadano medio holandés uno tenía oportunidad de contemplar con frecuencia múltiples indicios de las costumbres del día a día en los Países Bajos. Ahora vivo en la ciudad, más concretamente en un barrio del que no se puede afirmar que sea Holanda, sino más bien un híbrido de lo más extraño entre Holanda y Turquía. He dejado por tanto de ver ciertas cosas para pasar a ver otras que antes no veía, como tiendas de muebles en las que hasta los felpudos se adornan con piedrería destellante, señoras con burka en bicicleta y barberías que bullen los domingos al tope de su capacidad. El caso es que el otro día dando un paseo me alejé de mi zona habitual y al momento apareció ante mi vista una de esas genuínas, si no la más genuína de todas, escenas made in Holland: la mítica mochila pendiendo de lo alto del poste de una bandera. Caí en la cuenta entonces de que aún no habíamos tratado este asunto en el blog, lo cual es del todo inaceptable. Vamos a ello pues.

domingo, 15 de junio de 2014

Holanda fuera de Holanda: tres puntos del mapamundi que se parecen pero no son


Si alguien te enseña una fotografía de un punto cualquiera de los Países Bajos lo más probable es que la identifiques al momento. Holanda tiene uno de los estilos arquitectónicos más peculiares de nuestro planeta: Canales, casas estrechas y alargadas, ladrillos rojizos, grandes ventanales y fachadas que cuidan hasta el más mínimo detalle. Tanto es así que, por motivos diversos, en algunos lugares del mundo que poco tienen que ver con Holanda han intentado calcar con más o menos éxito esta estética tan característica. Hoy repasamos tres curiosos rincones del mapamundi que, a pesar de encontrarse muy muy lejos, vistos en una foto podrían confundirse perfectamente con los Países Bajos.

domingo, 8 de junio de 2014

Los horarios en Holanda, ¿a qué hora están activos personas, comercios, oficinas o lo que se tercie?


La descripción de los horarios en los Países Bajos es una de estas cuestiones que, dependiendo de las ganas de hablar con que te hayas levantado por la mañana, puede resultar tanto complicadísima de expresar como abrumadoramente sencilla. ¿Cuándo vas a encontrar las tiendas abiertas en Holanda? La respuesta corta: cada cual hace lo que le sale de los mismísimos cojones. La respuesta larga intentaremos desarrollarla en el artículo que sigue.

jueves, 22 de mayo de 2014

Si no lo sabes pregúntaselo a google (IV)


Consultando las estadísticas del blog a veces uno se topa con detalles curiosos. Por ejemplo si echamos un ojo a los países de los que proceden los lectores veremos este detalle: La mayoría de las personas que pasaron por aquí desde que la página comenzó su andadura se encontraban en los Países Bajos. Normal. El siguiente país que aparece en la lista, casi empatado, es España, lo cual también es comprensible. Siendo ésta mi nación imagino que la habré mencionado en unos cuantos artículos. Y, ahora viene la sorpresa, el puesto número tres lo ocupa nada menos que... ¿Bélgica, que se parece mucho a Holanda? Nah. ¿Alemania o el Reino Unido, que están aquí al lado? Nop. ¿Cualquier otro país hispanohablante de todos los que tenemos en América del Sur? Qué va. En el puesto número tres, aventajando por goleada a todas las anteriores opciones, están los Estados Unidos. Sí, sí; los Estados Unidos. Yo no sé si resulta que hay muchísimos hispanos viviendo en norteamérica que están barajando ahora mismo la idea de mudarse precisamente aquí. O si la gente de aquellas tierras se aburre tanto tanto en sus casitas de suburbio a las que no llega el bus urbano que pasan los días escaneando el inernet y llegando a parajes virtuales a los que nadie llega jamás, aunque sean altamente irrelevantes para su persona. Tal vez sea simplemente que, sin pausa pero sin prisa, a base de inmigración los EEUU hayan pasado por fin a formar parte de la lista de hispanohablantes que mencionábamos más arriba (ya nos lo vaticinaba la cátedra de spanglish de Massachusetts). Sea como fuere, para nosotros ha llegado la hora de repasar las búsquedas absurdas que, no sabemos si desde norteamérica u otros rincones del mundo, han ido a recaer en esta página durante los últimos meses.

domingo, 11 de mayo de 2014

Ver la televisión holandesa online


Más allá de nuestras evidentes diferencias, si hay algo que nos une a neerlandeses e hispanos por encima de cualquier otra cosa es nuestro mutuo amor por la telebasura. No en vano ellos son los célebres inventores del formato gran hermano y España por su lado es el país que ostenta el dudoso honor de haber celebrado el mayor número de ediciones del infame show (y como no nos parece suficiente, aún seguimos sacando más).

¿Parecidos y diferencias? Así a primera vista diría que nosotros tendemos más a las siliconas mientras que ellos, sin despreciar las primeras, muestran predilección por lo escatológico. Y hay que reconocer que son los que le echan más cojones al asunto; no en vano planean empaquetar a un hatajo de desgraciados y enviarlos de por vida al planeta Marte para montarse un reality con ellos.

lunes, 28 de abril de 2014

Tirar del ganso, el deporte políticamente incorrecto de los Países Bajos


En todos los hornos cuecen habas... o al menos guisantes secos. Y es que aunque vivamos en un país en el que la dierenambulance opera con más premura que las ambulancias normales y en el que se colocan en los parques bloques de madera agujereados para que avispas y otros insectos felices puedan resguardarse en sus orificios para dormir calentitos, eso no significa que no exista ningún trapo sucio que podamos sacar a la luz. Sí, ellos también tienen su cabra en el campanario, su corrida de toros, su caza del zorro o sus peleas de gallos. En otras palabras, su actividad lúdica nacional basada en el maltrato de cierta especie animal. En este caso las víctimas escogidas no son otros que los gansos.

domingo, 13 de abril de 2014

Crónica de un reposo obligado o cómo sobrevivir a un accidente en los Países Bajos


En un lugar próximo a Flandes cuyo nombre despunta en toda ocasión que se mentan estupefacientes y vivanderas, no mucho tiempo ha que vivía quien estas lineas escribe y cuyos emprendimientos, al igual que los del maltrecho caballero de la Mancha, no llegaban a buen puerto jamás. Siendo su más reciente desventura una desafortunada colisión, tonta donde las haya, con su recién estrenada bicicleta. Aquí se había quedado nuestra historia, justo después del regreso desde el hospital. ¿Pero qué pasó después y, más importante, qué consejos puedes extraer de dicha experiencia si en algún momento la fortuna te depara la misma sorpresa que me deparó a mí?

viernes, 4 de abril de 2014

Un paseo gastronómico internacional sin moverse de Amsterdam


Cuando era joven, mi vida social giraba unívocamente en torno a la mezcla de un cartón de Don Simón y una botella de sky cola del Lidl. Esta delicatessen no era en ningún modo despreciada allá de donde yo vengo pues, atención al dato, cuando dejabas tu botella de plástico esperando en la calle para entrar en algún bar, siempre había alguien que se la llevaba. El caso es que esta gloriosa etapa de ocultar un calimocho paupérrimo bajo las ruedas de un coche pasó a la historia hace mucho tiempo. Desde que vivo en Amsterdam, sea la cultura del expat, el modo de vida de la tierras bajas o simplemente el hacerse mayor, parece que si quieres pasar un rato en compañía has de desembolsar mínimo cuarenta euros y siempre, siempre, ir a un restaurante. Yo que siempre fui mucho más de bebercio que de comercio seguiré añorando hasta el infinito los tiempos de la sky cola pero hay que reconocer que, puestos a mover el bigote, Holanda en general y Amsterdam en particular ofrecen una ventaja importante: para suplir las deficiencias de la cocina holandesa, muy sencillita y que no entusiasma ni a los propios nativos, albergan una variedad de restaurantes internacionales que puede dejar a más de uno (sobre todo si es de provincias, como quien suscribe) con la boca abierta. Así que, si os parece que es digna de tenerse en cuenta la opinión sesgada de una persona que no es vegetariana por ahorrarse las molestias y sólo tiene paladar para distinguir el camel del malboro, en el siguiente artículo voy a reseñar brevemente todas las cocinas internacionales que vaya probando y recomendar algunos restaurantes amsterdameses* que, o por su calidad o por su precio, merezcan la pena. Este post no está pues zanjado, sino que lo iré actualizando a medida que vaya añadiendo nuevos países a mi lista particular. Empecemos con ella pues.

sábado, 22 de marzo de 2014

¡Olvídate de mí, lo dice un holandés!


¿Os acordáis de aquella película en la que la chica de Titanic llevaba el pelo de colores y Jim Carrey no hacía de Jim Carrey? Eternal sunshine of the spotless mind se llamaba, en español El brillo eterno de la mente inmaculada. Perdón, en español ¡Olvídate de mi!, un título igual de bueno y mucho más descriptivo. Resumiendo: Jim conoce chica, la cosa empieza bien pero acaba fatal y ella decide borrar toda la desagradable historia de su cerebro (borrarse a Jim Carrey parece una idea bastante buena, todo hay que decirlo) y seguir con sus quehaceres como si allí no hubiera pasado nada de nada.

Si a tí, a mí y a todo aquel que haya mantenido tratos amorosos con Jim Carrey la idea de borrarse fragmentos selectivos de la memoria nos parece una idea fascinante (quién pudiera borrarse Breaking Bad para vérsela entera una y otra vez) existe un grupo de académicos holandeses a los que les ha parecido el no va más y ni cortos ni perezosos se han puesto manos a la obra para hacerla realidad.

lunes, 10 de marzo de 2014

La obsesión holandesa por la decoración festiva y sus feestwinkels, tiendas específicas para este propósito


Si eres holandés es precepto que te enfundes un disfraz al menos una vez al año: el día de la reina. Durante esta jornada las vestimentas naranjas son imprescindibles pero insuficientes, pues tanto más triunfarás cuantos más complementos, qué decir tiene que de color naranja también, incorpores a tu atuendo. Sombreros, pelucas, gafotas.... cuanto más y más ridículo mejor que mejor. Si además te cuadra un año en el que se celebra algún campeonato futbolístico que involucre a la selección nacional como son el mundial o la eurocopa, el número de veces que has de desempolvar tu uniforme fiestero se multiplica. No es necesario que seas de los que van hasta el estadio a animar al equipo en primera línea, pues mismamente para bajar al bar es raro quien no se engalana con joyas del diseño como cuernos de vikingo naranjas o melenas de león naranjas.

viernes, 28 de febrero de 2014

El Hotel Lloyd, de reclamo para emigrantes a la versión holandesa del resplandor


Este fin de semana he hecho los deberes. El monumento abierto del mes, evento que cada mes abre las puertas de (¿lo adivináis?) algún edificio declarado monumento a lo largo de la geografía holandesa, recaía en Amsterdam y además bien cerca de mi casa. Le di vueltas y más vueltas pero al final no encontré ninguna excusa para dar rienda suelta a mi pereza inherente y no aparecer en el punto en cuestión con mi libretita y mi cámara de fotos barata. Así que en el artículo de hoy os voy a presentar del Hotel Lloyd, uno de los edificios emblemáticos de Amsterdam que a pesar de no ser demasiado antiguo concentra tras sus paredes una cantidad de historia de la que pocas construcciones pueden presumir. Y por si ésta no fuera razón suficiente para hablar de él, resulta que en el hotel se organizan también multitud de actividades culturales, algunas de ellas gratuitas, que puede que os interesen.

viernes, 14 de febrero de 2014

Dos puntos curiosos de la frontera neerlandesa y un tercero que pronto va a cambiar


Aunque los que vivimos en el Ranstad somos los más aislados por quedar nuestra zona en medio y medio del territorio holandés, los que residáis en otras áreas de Holanda, como es un país tan pequeño, tenéis muchas posibilidades de vivir cerca de una frontera: la alemana por el este o la belga por el oeste. Hoy vamos a repasar dos puntos fronterizos muy curiosos que algunos tal vez conozcáis y un tercero del que probablemente aún no sepáis nada, pues aunque ha sido noticia hace poco no se le ha dado nada de bombo en los medios (incluso cuesta encontrar información en la red). Y quizá saquéis del artículo alguna idea para una ruta de turismo alternativo por el sur.

domingo, 9 de febrero de 2014

Repaso de los principales seguros en Holanda, ¿cuáles deberías tener?


Como muchos sabéis, estos días me ha tocado ser parte activa en un accidente. Aunque al final, al menos por el momento (crucemos los dedos) no he tenido que hacer uso de ningún seguro, he aprovechado la convalecencia para repasar, por lo que pudiera acontecer, esos fajos de papeles aburridos que uno guarda pero nunca lee. Aquí va pues, fruto de este estudio, una lista con los seguros que tenéis que tener, los que deberíais tener y los que puede que tengáis. En principio los nombres de todos ellos parecen muy complejos, pero pronto veréis que las palabras son tan largas porque terminan siempre por verzekering, que significa seguro. Los imprescindibles son los tres primeros de la lista.

sábado, 1 de febrero de 2014

Hacer la compra online en el Albert Heijn


Una de las primeras cosas que me compré nada mas trasladarme desde España a la casita de Aalsmeer fue un carrito de octogenaria. Sí, de esos que las abuelas llevan a la compra cada mañana, sólo que el mío, en un fallido intento de rediseño, en vez de ser marrón es violeta y en lugar de estampado a cuadros viene decorado con pequeñas espirales. Pero es que el súper, hablando en plata, quedaba a tomar por culo. Así que para solventar este problema de distancias, problema por otra parte inexistente para mis compañeras por obra y gracia de sus bicicletas, no me quedaba otra opción que hacer un único viaje los sábados con el objetivo de aprovisionar las alacenas para el resto de la semana. No caí entonces en la cuenta de que el ubicuo Albert Heijn ofrece un servicio de entrega a domicilio que, aunque tiene sus más y sus menos, en determinadas ocasiones resulta la mar de práctico. Como por ejemplo cuando te atropella un coche y has de permanecer por fuerza dentro de casa reposando tu espalda maltrecha.

miércoles, 15 de enero de 2014

El desenlace de mi breve relación con la bicicleta y una experiencia de primera mano en los servicios de urgencia de Holanda


Existe cierto tipo de gente a los que la fortuna les sonríe de tal manera que se dice de ellos que han nacido con un pan debajo del brazo. Y luego estamos los que en vez de pan traemos de serie toda una empanada que se encuentra no bajo una axila sino bien plantada entre oreja y oreja. Y es que como le pasaba a Paco Martinez Soria con la ciudad, yo siempre tuve claro que con mis reflejos de galápago centenario y mi retardo de varios (incómodos) segundos para distinguir derecha de izquierda aquello de la bici no era para mi. Pero todo es pasar los primeros días, me decían. Ya verás como uno se acostumbra enseguida, me decían. Al final, como no podía ser de otra manera, acabó sucediendo lo que tenía que suceder, para algunos un paso definitivo en el proceso de integración en los Países Bajos pero para mí un susto de los gordos.

viernes, 10 de enero de 2014

Visitando Artis, el zoo de Amsterdam


Artis es el parque zoológico de Amsterdam. Aunque en realidad no se llama 'Artis' sino 'Natura Artis Magistra' (La naturaleza es la maestra del arte), nombre latino infinitamente más pomposo que nos da una pista sobre la época en que fue fundado este zoo: A principios del siglo diecinueve. Lo cual no es demasiado antiguo si lo comparamos por ejemplo con los canales del centro de la ciudad, pero resulta todo un veterano en lo que a zoológicos concierne: El más antiguo del mundo abrió sus puertas en Viena no demasiados años antes. Volviendo a las pomposas costumbres de la época, los fundadores de Artis fueron tres señores de mucho abolengo, de familia amsterdamesa de toda la vida, precursores también de las autopistas de la información: Westerman, Werlemann y Wijsmuller, o como se los conoce en conjunto: WWW.

sábado, 4 de enero de 2014

Peter van der Helm, el tatuador que consigue que tus tatuajes duren y duren y duren... para siempre


Como ya sabemos tirar cosas a la basura no es plato de gusto para ningún holandés que se precie. Y si uno se pone a buscar, puede encontrar elementos que no son correctamente aprovechados hasta en los lugares más inesperados. Pongamos por caso que te haces un tatuaje, te gastas tus buenos dineros y cuando por fin está todo a tu gusto vas.. y te mueres. ¡Zonde van het geld!* Personalmente no es un tema en el que haya reparado nunca, pero si nos ponemos a pensarlo debe ser una espinita clavada en la conciencia de los pocos holandeses que han decidido decorar su epidermis con un tatuaje como dios manda.